Eisā

Eisā a través de las eras

-Trajes

Antiguamente cuando se interpretaba eisā, los hombres jóvenes vestían kimonos bashô-fu (ropa de fibra de banana) atados con cinturones obi de paja, y las mangas estaban atadas con cuerdas de paja y tocados también de paja. Las chicas se vestían con kimonos azul oscuro o con bashô-fu, y con tocados de tela o de paja. En la eisā de Kokuba en la ciudad de Naha, los intérpretes cubrían sus rostros con toallas.

En los años luego de la Segunda Guerra Mundial, durante la transición desde las canciones nenbutsu hasta las de amor y folclóricas, los trajes eisā fueron modificados en gran medida. El traje moderno para hombres es elegante, compuesto de un par de pantalones blancos, un chaleco sin mangas por encima de una camisa blanca, polainas con líneas verticales blancas y negras, una par de zapatos de lona, y una pañoleta púrpura larga rodeando la cabeza. Un kimono azul oscuro decorado con patrones kasuri, un pañuelo blanco con puntos negros alrededor de la cabeza y un par de sandalias de goma es la nueva vestimenta para las chicas. Cada asociación juvenil inventa su propio estilo de chaleco, el cinturón obi, y el tocado, los que los integrantes modifican continuamente.

A pesar de la tendencia reciente, las aldeas de Heshikiya y Henna en la población de Katsuren conservan firmemente su vestido tradicional eisā sin ningún tipo de modificación. Los hombres visten kimonos negros atados con cinturones obi negros sobre camisas de manga tres-cuartos y pantalones blancos. Las mangas del kimono se enrollan hasta los hombros y se atan con una toalla que se pasa entre los hombros. Las toallas blancas son muy prácticas ya que una se lleva en la cabeza y la otra se cuelga del cinturón obi. Las chicas visten kimonos azul oscuro y tocados. Estos son trajes tradicionales con profundidad y simplicidad en medio de la tendencia actual hacia diseños más y más brillantes en la danza eisā.