En Progreso
TEATRO NOH: PRINCIPIOS Y PERSPECTIVAS
por Kunio KOMPARU ©
Traducido y publicado bajo autorización de
Floating World Editions
Parte Uno: Principios y Perspectivas
5. La Teoría de los Cinco Elementos: Su Significado en el Ciclo de la Cinco Obras
5.2. Las Cinco Categorías de las Obras de Noh
Las obras de Noh son clasificadas en cinco categorías de acuerdo al personaje principal -dioses, hombres, mujeres, lunáticos o demonios- y este sistema se cree que ha sido concebido en relación con la Teoría de los Cinco Elementos, como se ve por la organización de un programa hecho de una obra de cada categoría en el orden dado, o el ciclo de cinco obras. Hoy en día consideraciones de tiempo por lo general dan como resultado la presentación de programas abreviados de solo dos o tres obras Noh, una o dos piezas Kyôgen y algunas danzas cortas, pero el ciclo de cinco obras es el original y correcto. Un programa completo comienza con OKINA y se desarrolla a lo largo del día con una obra de cada categoría. Este método fue incluso convertido en ley en los rígidos días del shôgunato Tokugawa.
El principio del ciclo de cinco obras no solo sirve para la compilación de un programa sino que también funciona en el establecimiento de una correspondencia entre la naturaleza en su providencia y el hombre, quien es la forma de vida que ejecuta y observa el Noh. Con esto quiero decir que el ciclo de cinco obras sobre cinco temas enfrenta al curso del tiempo en un día. Nosotros los seres humanos existimos dentro dos marcos de tiempo, uno solar, el día activo, y uno lunar, la noche pasiva, y las cinco etapas que conducen a la realización artística en el Noh dividen esa etapa solar en cinco partes. El Noh fue originariamente concebido para ser ejecutado durante el día, y fueron contadas las excepciones de representaciones nocturnas. Esto está estrechamente relacionado con la orientación direccional del escenario Noh, que en forma correcta da frente al sur. Esta división en cinco también refleja la preferencia tradicional por los números impares, y, como se ve en la Tabla 2, corresponde a la estructura conceptual operante del Jô-Ha-Kyû y proporciona una estructura composicional apropiada para los elementos estructurales característicos del Noh. Si diagramamos estas dos estructuras, la conceptual (el grado de YUGEN en el sistema Jô-Ha-Kyû) y la estructural (categoría y posición en el programa), conseguimos una pirámide en la cual una obra de la tercera categoría, cuyo nivel corresponde al desarrollo Ha, está en la cima (Tabla 3).
Claramente el punto artístico mas elevado en una representación Noh es la obra acerca de mujeres. La medida de una obra es siempre el grado de Yugen innato en esta. El Jô-Ha-Kyû de un día de Noh, en otras palabras, expresa que el dios es un ser gentil de la mañana; la espada destellante del guerrero refleja el brillante sol de la mitad de la mañana; el clímax de Yugen viene al mediodía cuando nuestra energía está en el máximo; lo profundo de la locura paralelo al descenso del sol; y el demonio es la personificación de la oscuridad en ascenso. Como se mencionó anteriormente los programas completos de cinco obras Noh son en estos días cada vez menos frecuentes, por tanto el significado de la relación del ciclo con las etapas del día esta gradualmente debilitándose, pero el principio es todavía venerado incluso en programas abreviados. En una representación de incluso dos obras, una obra de un demonio nunca estaría antes de la de una mujer. Miremos ahora a cada uno de los temas de las cinco categorías. (La Tabla 3 da ejemplos de piezas de cada categoría y al mismo tiempo muestra un programa típico de un día).
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