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Derechos Reservados  © Mauricio Martinez R..

TEATRO NOH: PRINCIPIOS Y PERSPECTIVAS

por Kunio KOMPARU ©


Traducido y publicado bajo autorización de

Floating World Editions



Parte Dos: Elementos y Patrones


9. El Escenario de Noh, espacio simbólico


9.2. Orientación Direccional


9.2.2. El Paraíso Occidental



Además de combinar las ventajas de la iluminación natural al dar de frente al sur y el principio de las Cuatro Correspondencias Divinas, la orientación del escenario Noh también incorpora y pone en práctica el Paraíso Occidental, un concepto del budismo de la Tierra Pura que toma a la dirección occidental como un espacio. Esta idea deriva de una profecía que dice que el budismo gradualmente se extenderá hacia el este; esto a su vez dio surgimiento a la idea de que existimos en el este y que adoramos a Buda en el lejano oeste. Una manifestación de este es el hecho de que mientras que la mayoría de templos están orientados hacia el sur, aquellos construidos a partir del periodo Heian incluían una puerta en la pared occidental. La Tierra Pura es el territorio sagrado, el paraíso, el otro mundo. El puente del escenario Noh, situado al oeste del escenario principal, puede ser visto como el puente de los sueños que conecta este mundo (el escenario) con el otro mundo (el cuarto del espejo) y la cortina de cinco colores entre el puente y el cuarto del espejo como un símbolo de la naturaleza desprendida (tierra, agua, fuego, viento y aire) que separa los dos mundos de acuerdo con la Teoría de los Cinco Elementos.


Sin embargo existen algunos pocos escenarios Noh que dan de frente al norte. Se cree que es ya sea por las condiciones topográficas o por respeto a la realeza de la época -los actores no deben pretender que el emperador se siente de frente al norte durante una función. Cuando un escenario está orientado hacia el norte, la pintura del pino en la pared anterior se pinta usualmente como si se viera desde atrás.


En la actualidad los escenarios Noh construidos dentro de una edificación moderna, los cuales son iluminados artificialmente, pueden estar en cualquier dirección y ser usados para puestas en escena a cualquier hora del día o de la noche, pero todavía se respeta la convención de orientación hacia el sur. Las cuatro columnas originalmente necesarias para sostener el techo se han convertido en un símbolo de orientación, y los movimientos sobre el escenario toman diferentes significados cuando el actor se ubica mirando en diferentes direcciones. Originalmente era apropiado para el intérprete mirar hacia el cuarto del espejo y asumir una postura de oración cuando se cantaba la frase "adorando al Buda del oeste", aunque en la actualidad el énfasis y la interpretación varían dentro de cada escuela del Noh y las posturas de danza no coinciden en forma consistente con las referencias a la dirección.

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