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Derechos Reservados  © Mauricio Martinez R..

EL PODER DE OKINAWA

Las Raíces Musicales de las Islas Ryûkyû

Por John Potter


5. Flores no Armas: Shoukichi Kina


La polémica de Kina


Los comunicados de prensa de Kina han incluido citas de algunos músicos de fama internacional. Entre ellos, Ry Cooder fue citado diciendo: "Me gustaría dar el nombre de Shoukichi Kina como el del mejor artista japonés". David Byrne, que más tarde publicaría el recopilatorio Peppermint Tea House en su propio sello Luaka Bop, dijo: "Hay una gran riqueza musical en Okinawa, y la música de Shoukichi Kina es un prototipo de esta riqueza". Quizá lo mejor de todo fue esta cita de 1978 de Bob Marley: "La música de las islas de Okinawa y, sobre todo, la de Shoukichi Kina me inspira mucho. Me gustaría tocar con él en su próximo concierto japonés".


A Kina siempre le ha gustado cortejar a los famosos. Está casi demasiado ansioso por hacerlo y sus libros están plagados de comentarios elogiosos de varios músicos, políticos y otras celebridades, mientras que la pared de la entrada de su club Chakra está cubierta de grandes estampas suyas captadas en prestigiosas oportunidades fotográficas. Si ha tenido muchos admiradores, tampoco le faltan detractores, y en Okinawa ha mantenido enconadas disputas con otros músicos. Su división de opiniones es tal que en los últimos tiempos ha tendido a convertirse en una figura bastante aislada. Como admite su representante, Kazutoshi Takise (y no sin cierta admiración): "Está solo".


Ry Cooder parece haberse situado a ambos lados de la valla. En una entrevista de julio de 1999 para la revista británica fRoots hablaba de la grabación de Bloodline casi dos décadas antes: "Shoukichi Kina está loco, el Los Van Van de la música de Okinawa. Yo le decía, hombre, más despacio. Y él dice que no, que estamos saltando, que nos estamos volviendo locos, como Bob Marley a toda velocidad. Pero su esposa era una gran cantante. Esa hermosa balada "Hana" que a todo el mundo le gusta del disco es de ella, no de él. Se separaron, así que ya no hay baladas buenas".


Bueno, no del todo. Pero Cooder también afirma en la misma entrevista que hace 20 años todo era mejor en Okinawa y que los "grandes tipos están todos muertos". También tacha a las Nenes de "bonitas porque son para el mercado japonés"(!) Le pedí a Sadao China una reacción a los comentarios de Cooder. Me contestó (muy tranquilamente): "Puede que Ry Cooder se haya apasionado por la música de Okinawa en el pasado, pero ni siquiera me tomo en serio los comentarios de una persona así. Si realmente quiere aprender sobre la música okinawense, debería recorrer todas las islas Ryūkyū. Entonces vería con qué fuerza siguen existiendo las canciones y los músicos".


Sin embargo, dentro de Okinawa, Shoukichi Kina se ha distanciado cada vez más de muchos de los otros grandes músicos. Cuando los Tres Grandes -Kina, Nenes y Rinken Band- estaban en la cima de su popularidad, sólo tocaron juntos en el mismo concierto en una ocasión. Fue en 1995, cuando los tres participaron en la "Kingdom Festa in Ryūkyū". El ambiente era especialmente tenso aquella noche, y para cuando Kina y Champloose empezaron el final una versión ultra frenética de "Haisai Ojisan", las otras dos bandas ya habían recogido y se habían ido a casa. Un periódico lo publicó bajo el título "Las Agrupaciones de Okinawa Luchan en Vano". El cantante de Begin, Eisho Higa, también ha recordado la vez que presenció la incómoda imagen de Shoukichi Kina y Rinken Teruya mirándose enfadados en la sala de espera de un aeropuerto, durante lo que él afirma fueron cinco minutos. Hasta 2000, Shoukichi Kina tampoco había aparecido nunca en ninguno de los Festivales de Ryūkyū. Kina simplemente nunca fue invitado, aunque indicó que no estaría interesado en participar. Finalmente, cuando se le pidió que apareciera, sólo después de pensarlo mucho aceptó encabezar el cartel del evento de 2000. Sin embargo, en este festival no aparecieron Sadao China ni las nuevas Nenes, ni tampoco Rinken Band. Cuando Kina apareció por segunda y última vez al año siguiente, pronunció un malhumorado discurso desde el escenario en el que negaba la necesidad de un Festival de Ryūkyū.


Le pregunté a China por qué no había invitado a Kina al festival desde entonces. Me contestó: "Bueno, los músicos del Festival de Ryūkyū sienten que todos son amigos y colegas. Forman parte de lo mismo y cada músico es importante. Esto crea un gran ambiente en el escenario. Pero alguien como él pone a todos muy nerviosos y eso acaba con el ambiente. Los demás músicos se ponen muy tensos. No merece la pena".


Y no se trata sólo de los Tres Grandes. Desde que dejó Champloose y se forjó una exitosa carrera musical por su cuenta, el ex guitarrista Takashi Hirayasu ha tenido muy pocas cosas buenas que decir de su antiguo amigo. Algunos de los jóvenes músicos japoneses que fueron invitados a tocar en el álbum Rainbow Movement de Kina, como la banda Soul Flower Union, han cortado relaciones con él desde entonces, al sentir que se esperaba de ellos que se convirtieran en seguidores de Kina en lugar de trabajar con él en pie de igualdad.


También he vivido situaciones incómodas como escritor, simplemente por intentar conocer la música de tantos músicos okinawenses como fuera posible. Como huésped de Keiko, la hermana de Kina, recuerdo que tuve que justificar mi asistencia a un concierto de Sadao China. Lo consideraba un acto traicionero, que Keiko sólo acabó aceptando al verlo como un deber desagradable que yo tenía que cumplir a regañadientes como periodista. A la inversa, me he encontrado en la situación de que, en compañía de músicos "enemigos", he tenido que poner excusas para asistir a un concierto de Kina o incluso para escuchar sus discos.


¿A qué se debe esto? Shoukichi Kina afirma que todo se remonta a mucho tiempo atrás. Cuando empezó a tocar, disgustó al mundo del minyo (canciones folclóricas) al mezclar en su música diferentes ingredientes que al principio les resultaban inaceptables por no ser minyo "de verdad". (Champloo, al fin y al cabo, significa "mezcla"). Mientras tanto, a la fraternidad del pop y del rock tampoco le gustaba mucho, por lo que sólo consiguió molestarles a ellos también. Más tarde, afirma que todos se dieron cuenta de que su música era genial después de todo y empezaron a copiarle. Puede que la verdad se haya perdido en la noche de los tiempos, pero ¿es realmente tan importante? Pero es una lástima que en estas islas tan pacíficas no haya armonía entre algunos de los mejores músicos. Yasukatsu Oshima ha adoptado una postura más relajada y simplemente se refiere a ello diciendo que son "como hermanos y hermanas peleándose".


El estatus casi de culto de Kina entre su propio entorno no le ha ayudado precisamente a ver las cosas con objetividad. Durante varios años de su juventud, Kina y algunos miembros de Champloose fueron seguidores del gurú indio Osho Rajneesh. Algunas de las primeras canciones de Kina también contienen referencias a las enseñanzas de Osho. El discurso de Kina se asemeja a veces al de una figura de culto. Un periodista que conoció a Kina en Okinawa lo describió como algo parecido a ir a otro planeta. Kina es ciertamente carismático, pero cuando no está rodeado de seguidores también se muestra como una persona muy cálida, amable e incluso gentil, capaz de una gran bondad y generosidad. Si se le coge solo, puede ser un gran anfitrión, dispuesto a hablar libremente y a discutir de cualquier cosa. Pero su dirección y su equipo están tan preocupados por protegerle de las "malas" influencias externas o de cualquier cosa que teman que pueda no gustarle, que probablemente han dañado permanentemente sus posibilidades de una mayor aceptación en la escena musical mundial. Los planes grandiosos de Kina y su discurso "sin fronteras" le han apartado de muchos de los músicos con los pies en la tierra, como Rinken Teruya, por ejemplo, que era vecino de Kina cuando ambos crecían en Koza. Algunos músicos me han dicho que creen que su activismo es demasiado amplio y generalizado: Sting quiere ayudar a la selva tropical, pero Kina quiere transformar el universo entero. Sin embargo, hay que recordar que es un okinawense inmerso en su propia cultura, y su discurso sobre la espiritualidad y el universo no difiere esencialmente del de muchas otras figuras de la música mundial, como el difunto músico de Mali Ali Farka Toure, o incluso Bob Marley.


Lo amemos o lo odiemos, y sean cuales sean los resultados de sus planes para cambiar el mundo, lo cierto es que Kina es el músico que más ha influido (y también el más controvertido) en la relativamente breve historia de la mezcla de música tradicional y moderna en Okinawa. Si "Haisai Ojisan" y "Hana" son a veces una piedra de molino alrededor de su cuello, también son las canciones más conocidas ahora en las islas y fuera de ellas.




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